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Oportunidad para el desarrollo del sector
Lo que marca el ritmo de la minería a nivel mundial es el mercado internacional, nosotros no controlamos los precios de los metales, el mercado es una entidad volátil, el que ha crecido a medida que avanzamos en el tiempo. Antiguamente, los ciclos mineros eran mucho más definidos y más marcados por la oferta y la demanda, hoy dependen de asuntos políticos a nivel internacional.
También, el oro que ha sido un metal tradicionalmente volátil para el mercado financiero, ahora está acompañado de los metales bases como el cobre y zinc. Todos sufren según la dinámica que puede tener el mundo no solo en su desarrollo económico y demanda por el metal, sino además en su entorno político.
Los ciclos mineros, y eso creo cada vez con mayor énfasis, parecen ser más cortos y eso significa que nosotros tenemos una obligación de tratar de aprovechar esos periodos de precios altos como el que se ha iniciado este año para poder avanzar en nuestros proyectos, lograr las inversiones, y tener una producción ya incrementada en el más largo plazo.
Debemos aprovechar la parte efectiva del ciclo minero, porque de no hacerlo implica, a veces, postergaciones incalculables del desarrollo de los proyectos. Las empresas, hoy más que nunca están preparadas para este periodo de precios altos, porque la eficiencia y productividad de las mineras, particularmente en Perú, se debe a que tenemos precios o costos operativos muy competitivos a nivel internacional.
El valor de las empresas en el mercado se está recuperando, luego de haber caído hasta en algunos casos en 80%, a fines del 2015. La misma Bolsa de Valores de Lima (BVL) se está beneficiando con ello. El contexto es ideal si lo vemos de ese punto de vista.
Pero también tenemos una realidad local, qué es lo que nosotros hacemos para que estos proyectos sean factibles y aquí es donde tenemos una serie de fallas. Aplaudo la posición que ha tomado el MEM, el de ser promotor no solo de la minería sino del desarrollo, que es el objetivo final de nuestro país y el de la actividad minera. El Gobierno debe tener una meta muy concreta en este aspecto.
Los problemas que enfrentamos localmente es el tema de medio ambiente. Hay un tema conceptual que está fallando. El concepto de que la exploración minera genera contaminación es falso y se tiene prueba de ello. Mientras ese concepto no cambie no podremos hacer las modificaciones más importantes al reglamento, y uno de ellos es el sistema administrativo negativo.
Otro tema que es utilizado políticamente es la supuesta sensibilidad ambiental de las cabeceras de cuencas y la necesidad de una definición de las mismas. Técnicamente, para decir que existe contaminación se tiene que hacer una línea de base para conocer la sensibilidad de los elementos ambientales en la zona donde se trabaja, independiente de si es cabecera de cuenca o no, y recién se puede decir si hay riesgo contaminación o no y como se debe evitar o mitigar . Este es un tema que se pretende usar políticamente. La definición “técnica” es solo un pretexto.
MIRANDO A LA MINERÍA
- Tenemos un enorme potencial geológico reconocido por muchas entidades a nivel mundial, por lo cual las inversiones seguirán llegando al país.
- En Perú, el 31% de la inversión minera ha ido a la exploración por oro y el 48% a metales base, y esto refleja la inversión en exploración de cobre que es un metal que hoy en día nos marca el ritmo del desarrollo y crecimiento minero en general.
- En el 2016, según SNL, Chile recibió US$ 443 millones de inversión minera y Perú US$ 429 millones, México US$ 415 millones.
- No estamos invirtiendo para descubrir nuevos yacimientos mineros sino para expandir los recursos conocidos porque estamos explorando alrededor de las exploraciones mineras. Y no promovemos selectivamente el desarrollo del sector minero, estamos promoviendo lo que sale. No hay un direccionamiento y no se busca crear tendencias.
- En el 2018, la inversión sí debe ser mayor y se podría captar el 8%, porque se puede hacer más inversión en perforación de manera más ágil y eficiente.